Más de cincuenta personas han pasado la noche del 18 al 19 de octubre en la azotea del Centro de Internamiento de Extranjeros de Aluche de Madrid denunciando las deficientes condiciones de internamiento y exigiendo su libertad.
Según información de SOS Racismo, “durante la última semana, en el CIE de Aluche, varios enfermos han recibido una atención sanitaria inadecuada, enfermos que además han sido expulsados a pesar de tener un cuadro febril complejo, como ha podido comprobar una de las organizaciones sociales que visitan este CIE. Cabe recordar que hace 5 años murió Samba Martine, interna en este mismo centro, tras serle negada la asistencia médica hasta en diez ocasiones. Esta misma semana también se ha podido contrastar falta de prendas de abrigo, lo que ha empeorado la situación de las personas enfermas. El cuadro más dantesco se vivió el pasado domingo por la tarde con enfermos esparcidos por el suelo sin ningún tipo de atención médica, al no estar concertada en ese horario, como denuncian las organizaciones sociales”.
Estas denuncias sobre la situación en centro de internamiento no son puntuales en este ni en otros CIES, sino que reflejan un problema generalizado y estructural. Incluso el Ministerio del Interior admitió en octubre de 2015 que incumple el reglamento de los CIE por “las necesidades económicas, presupuestarias y de personal que exige”.
Por todo ello apoyamos la Campaña Estatal por el cierre de los CIEs, impulsada por entidades como CEAR o SOS Racismo, que manifiesta y denuncia que:
• La dignidad no puede ser encerrada ni sometida dentro de un CIE, por esta razón la reivindicación de libertad y trato digno es una expresión de protesta tan importante como legítima ante las políticas migratorias de UE.
• Los CIEs quedan muy lejos de ser centros de acogida de migrantes como se pretende hacer creer en ocasiones a la opinión pública; son calabozos ampliados en los que se priva de libertad a personas para ser deportadas contra su voluntad. Por ello, consideramos legítimos y justos y vamos a seguir apoyando los movimientos de resistencia de las personas internas.
• Las políticas migratorias de la UE no sólo no respetan los Derechos Humanos sino que además generan racismo institucional en forma de denegación de asilo, identificaciones policiales, internamientos y expulsiones.
• El comportamiento de las personas internas y de las personas congregadas en apoyo en torno al CIE de Aluche demuestran cómo aún hay espacio para la solidaridad.
• La situación de los CIE es tan ilegítima como desproporcionada e insostenible al no ser ni un problema puntual en el CIE de Aluche ni específico de este centro, es un problema estructural que clama por el cierre de todos los CIEs del Estado
• Es necesario un seguimiento de los casos de cada una de las personas movilizadas, el trato al que son sometidas y el destino que se les depara. Asegurando sus derechos como la defensa judicial adecuada o la asistencia sanitaria.