El pasado lunes 6 de marzo de 2017 Acción en Red Madrid ha participado en el acto «Enrédate por el 8 de marzo«. Este evento estaba organizado por «enREDarse, espacio de trabajo en red sobre género del distrito Centro de Madrid» y tuvo lugar en el centro social comunitario Casino de la Reina.
Primeramente asistimos a la mesa-debate «Encuentro Mujeres del Mundo«, con gran éxito de asistencia. Tuvimos la suerte de escuchar la experiencia feminista de siete mujeres muy diversas.
La joven del colectivo EFAE (Empoderamiento Femenino Afrodescendiente en España) que tiene como uno de sus objetivos concienciar a otras mujeres afrodescendientes de la importancia de agruparse y empoderarse, visibilizar a la mujer negra y dar a conocer referentes del feminismo de esta raza de todas las nacionalidades. Resaltó la doble discriminación de género y racial a la que se enfrentaban.
La mujer de Bangladesh, que colabora con la Asoociación la Rueca y enREDarse, habló del drama que es nacer mujer en Bangladesh porque no tienes valor. Refiere como la mayor parte de las mujeres de su país se dedican a las tareas del hogar y a cuidar a su familia, que es un trabajo duro, no reconocido y no remunerado. Por todas estas razones resaltó la importancia de que las mujeres de su país conozcan sus derechos, el valor de su tarea y de su cuerpo, que aprendan a valorarse, que tengan tiempo para ellas mismas, y finalmente veía clave estar unidas para cambiar el mundo.
La salvadoreña forma parte de la Red de Mujeres Latinoamericanas y del Caribe en España. Quiso desmontar el mito de que todas las mujeres migrantes no tienen formación académica. Percibe que con las crisis se ha reactivado el feminismo en las calles de España. Resaltó la mayor discriminación que sufren las mujeres migrantes como mujeres, extranjeras, a veces negras o de otra raza no blanca y etc. En su opinión una de las virtudes del informe Sombra-Cedaw es que ha visibilizado la reivindicación de derechos de las trabajadoras del hogar. Por último hablo de la importancia de unir todos los feminismos en la lucha por la igualdad y la discriminación.
La congoleña es la coordinadora del área de la mujer de la Asociación Karibu. Resaltó que su país es peligroso nacer mujer. Por eso educar a una mujer es un motor, es educar a toda una nación, ya que éstas son quienes se encargan de educar a sus hij@s. Habló de que el trabajo que hacen las mujeres está invisibilizado en África a pesar de ser el impulso de la economía. Por otro lado hay un gran problema por la gran incidencia de violencia de género en el Congo y, la dificultad de denunciarlo por el rechazo social que provocaba. A pesar de todo ella animaba a las mujeres africanas a levantarse y reivindicar sus derechos. Para terminar también opinó que era necesario diseñar el modelo de convivencia que queremos tener entre todas las mujeres, para buscar puntos comunes y aliar los feminismos.
La mujer gitana quiso romper con los estereotipos que existen sobre el pueblo gitano, sobre todo por los programas televisivos sobre este asunto, que en su opinión son muy sensacionalistas. Habló de los avances que ha habido en los derechos de las mujeres gitanas. De su lucha para que las niñas estudien, acudan al colegio y estén escolarizadas. Como en la actualidad las mujeres gitanas se separan y se divorcian de sus parejas y, empiezan a tener voz y voto en su entorno. A pesar de todo, ellas y ellos quieren seguir educando en su cultura, pero desean que sus hij@s trabajen y se integren en la sociedad.
La madrileña, habló de los cambios que había habido en España en los últimos 40 años. Ella fue educada en servir a su familia, a su marido y a la sociedad. Y resaltó que aunque todo ha cambiado y mejorado mucho, todavía hay resistencias. Opinó que sin el feminismo no hay democracia. Habló de la necesidad de las mujeres y los hombres para que se materialicen estos cambios tan necesarios. Concluyó con la idea de que el feminismo no son cosas de mujeres, nos corresponde a tod@s.
La mujer marroquí de Casablanca explicó que ella era musulmada. Comentó que Marruecos es muy diverso, no es lo mismo hablar de la situación de las mujeres en las ciudades grandes o de aquellas de las zonas rurales. En Casablanca ahora mismo había muchas más libertades para las mujeres. Hay obligación por ley de que las niñas vayan al colegio y las mujeres tienen opción de ir a la universidad. Existe derecho al divorcio. Aunque todavía hacen falta muchos cambios.